Mi querido amigo,
si estás luchando contra la cistitis y los síntomas no parecen dejarte en paz, no te preocupes, ¡no estás solo!
Por desgracia, casi todos hemos pasado por ello al menos una vez. Sin embargo, es conveniente saber cuándo estos síntomas son una «parte natural del proceso» o si pueden dar lugar a complicaciones más graves.
Así que si tienes miedo de que sea el momento de ir al médico, ¡estás en el lugar correcto!
De hecho, en este artículo hablaremos de:
¿Preparado? ¡Nos vamos!
La mayoría de las cistitis están causadas por bacterias externas al organismo que entran en el tracto urinario a través de la uretra y comienzan a multiplicarse.
La mayoría de las veces, la cistitis está causada por bacterias intestinales y, en el 80% de los casos, por la bacteria Escherichia coli.
También puede surgir debido a las relaciones sexuales, la inserción de tampones o una mala higiene íntima.
Por otro lado, existen cistitis no infecciosas, en las que otros factores pueden provocar la inflamación de la vejiga, como la cistitis intersticial y la cistitis abacteriana.
Otros son:
Cuánta información de golpe, ¿verdad?
Pero no te preocupes: para entender la naturaleza de tu problema, no tienes que adivinar entre los tipos de cistitis que he mencionado.
Si confía en su ginecólogo o en la realización de pruebas especiales, ahorrará mucho tiempo y podrá iniciar inmediatamente un tratamiento específico.
Dicho esto, veamos ahora cuáles son las causas de la cistitis y cuándo consultar a un especialista.
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Si ya has sufrido una cistitis, probablemente sepas que los síntomas más comunes son:
Por lo general, la cistitis no desaparece en dos días. Sin embargo, hay algunos signos que permiten saber si la situación está mejorando o no.
Déjeme explicarle.
No dude en ponerse en contacto con su médico si observa que los síntomas no se resuelven en unos días o si empeoran.
Para que quede claro, si empieza a tener sangre en la orina o tiene fiebre, no lo deje pasar, sino que informe al médico inmediatamente.
El mismo principio se aplica si tu cistitis se repite con frecuencia: probablemente, la medicación que has estado tomando no ha tenido el efecto deseado (y en esta guía te explico por qué ocurre esto) y necesitas un tratamiento alternativo.
Así es, he dicho atención alternativa.
¿Se pregunta cuál?
¡Sígueme en el siguiente párrafo! 🥰
Se pueden seguir una serie de recomendaciones para prevenir la cistitis.
Por ejemplo, el zumo de arándanos o la toma de pastillas que contengan proantocianidinas pueden reducir el riesgo de infecciones recurrentes de la vejiga en algunas mujeres.
Sin embargo, en algunos casos los beneficios de los arándanos no son muy significativos.
Entonces, ¿qué hacer?
En primer lugar, recomiendo una serie de medidas preventivas:
Pero si necesita una ayuda extra, tenemos la solución para usted.
¿Has oído hablar de la D-manosa?
Es un azúcar simple que utilizamos en nuestros productos de la marca Dimann. En particular, elegimos la D-manosa extraída del abedul porque es de la mejor calidad.
Por lo tanto, este monosacárido ayuda a combatir y prevenir la cistitis.
¿Pero cómo?
En pocas palabras, llega a la vejiga y hace que las bacterias dejen de adherirse a las células. Es un poco como cuando no puedes quitarte un anillo porque tienes el dedo hinchado y entonces usas jabón.
A través de la micción, las bacterias se escapan, pero sin afectar a la flora bacteriana.
Si quieres saber más, prueba nuestro test«Encuentra tu camino» o escríbeme y cuéntame tu historia, estaré encantado de ayudarte.
Te abrazo fuerte desde aquí,
Lorenza
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