Empecé a padecer cistitis hace unos 10 años.
Después de investigar un poco, descubrí que todas las cistitis eran generadas por E. coli y asocié estos episodios de cistitis con épocas en las que sufría estreñimiento. Después, los episodios fueron cada vez más seguidos, hasta que tuve dolores cada dos meses.
Mi última cistitis fue en abril de 2020, en medio de un encierro, cuando lo único que tenía a mi disposición era un ordenador.
Estaba desesperada, incluso sangraba, dolores muy fuertes como cuchillos que me atravesaban el vientre y el costado derecho.
Tropecé con el sitio web de productos Dimann y pedí todo lo que el amable personal me recomendó: Dimann Flogo, Daily, Puro y Flor. Seguí exactamente todo lo indicado en el prospecto.
Desde aquel abril de 2020 no he vuelto a tener un episodio de cistitis paralizante.
A veces me siento un poco pesada, pero basta con volver a empezar el tratamiento Dimann para sentirme mejor inmediatamente.
Ahora, por ejemplo, tomo una cápsula de Dimann Puro todas las noches antes de acostarme, para estar más relajada.
Gracias a Dimann, ¡ya no tengo miedo!